ASAMBLEA DE FIN DE CURSO Y ELECCIÓN DE NUEVOS PRESIDENTES
Como viene siendo tradicional, el
domingo 14 de junio, el Movimiento
Familiar Cristiano ha celebrado su Asamblea de fin de curso en el Santuario
Ntra. Sra. de la Oliva. Durante este año y de acuerdo con los estatutos
corresponde renovar a los Presidentes Diocesanos.
Dirigidos por el Consiliario
Diocesano P. Balbino Reguera se inició la jornada con el rezo de laudes. Se continuó con el rezo del Ángelus antes de
pasar a la celebración de la Asamblea.
Al inicio de la misma los presidentes
salientes hicieron un repaso de los acontecimientos y actividades llevadas a cabo durante los cuatro años que han estado en el cargo, destacando la
visita de los Presidentes Nacionales y la Convivencia de la Zona Sur celebrada
en Cádiz. Expresaron, así mismo, su satisfacción por haber trabajado a favor
del MFC, lo que les ha supuesto una
experiencia muy gratificantes.
El Secretario informó a
continuación del resultado de la encuesta realizada sobre el cumplimiento de los
objetivos propuestos para el curso, que reflejaban el grado de implicación de
sus miembros en las actividades del MFC. Seguidamente el Tesorero presentó la
situación económica del curso resaltando que se estaban manteniendo los
objetivos previstos, a pesar de haber tenido que efectuar varios gastos
extraordinarios no previstos en el presupuesto.
Para proceder a la elección de
los nuevos Presidentes Diocesanos, el secretario dio lectura al artículo del
reglamento que hace referencia al proceso
de elección. La presidenta comentó las dificultades encontradas a lo largo de este proceso, resuelto
por la generosidad de un matrimonio, que por responsabilidad y afecto al
Movimiento, había aceptado presentarse para la elección.
Alfonso García Herruzo y Araceli
Priego Delgado expusieron los motivos que le han llevado a dar este paso, y nominaron
a las personas que iban a participar en su equipo de presidencia.
Se procedió a la votación, resultando elegidos por una amplia mayoría, siendo
refrendada por una calurosa ovación, por parte de los asistentes. Su
nombramiento tendrá que ser posteriormente confirmado por el Obispo Diocesano.
Terminó la asamblea con la
interpretación del baile de las cobijadas, típico de la localidad de Vejer de
la Frontera, que se inicia con un atuendo oscuro que les cubre totalmente, y que en su evolución cambia por el colorido y la alegría que deben impregnar la vida de los que caminan llenos de ilusión y esperanza.
Tras la Eucaristía celebrada en
la Capilla del Santuario, departimos una fraternal comida y reiteramos nuestros
buenos deseos para la temporada de
verano que vamos a iniciar, con la ilusión puesta en el nuevo curso.