MOVIMIENTO FAMILIAR CRISTIANO

Diócesis de Cádiz y Ceuta
(Asociación Pública de la Iglesia Católica)
mfamiliarcristiano@gmail.com
http://www.mfccadiz.blogspot.com/

31 diciembre 2012



Mensaje de los obispos españoles para la 


Jornada de la Sagrada Familia

Hoy, domingo 30 de diciembre, la Iglesia celebra la festividad de la Sagrada Familia. Con este motivo, la subcomisión episcopal para la Familia y Defensa de la Vida ha hecho pública una nota titulada "Educar la fe en familia".

Los obispos de la subcomisión, movidos por su "deber de pastores", invitan a todos los fieles a reflexionar sobre la vital importancia de la familia en la “educación de la fe”. Asimismo, recuerdan "la exigencia de conocer y transmitir mejor a las generaciones futuras la fe de siempre, de un modo especial en este Año de la Fe".

"Desde la primera evangelización la transmisión de la fe --afirman en su nota--, en el transcurso de las generaciones, ha encontrado un lugar natural en la familia". Hoy, afirman, se asiste "a una desvalorización del papel de la familia en este campo, debido a múltiples factores". No se puede dar por supuesta la vivencia de la fe cristiana en muchos hogares cristianos, con las consecuencias que ello conlleva en la asimilación de la fe por parte de los hijos. Por esto, animan a las familias "a ocupar su puesto en la transmisión de la fe, a pesar de las dificultades y crisis por las que atraviesan".

La nueva evangelización, subrayan, "debe ir dirigida de manera primera y prioritaria a la familia, como la realidad a la que más han afectado los cambios sociales y la poca valoración de la fe".

"La iniciación cristiana --explican--, que comprende el Bautismo, la Confirmación, la Penitencia y la Eucaristía, toma una especial relevancia en la familia, 'iglesia doméstica', comunidad de vida y amor, por ser donde surge la vida de la persona y esta es amada por sí misma. La familia vive dicha fe y participa también en la fe de sus hijos en las diversas etapas de formación y desarrollo de la vida cristiana. Así, el primer fundamento de una pastoral familiar renovada es la vivencia intensa de la iniciación cristiana".

"Los padres --añaden- apoyan a los hijos y caminan con ellos mientras realizan el aprendizaje de la vida cristiana y entran gozosamente en la comunión de la Iglesia para ser en ella adoradores del Padre y testigos del Dios vivo. La familia, de este modo, se convierte en el primer transmisor de la fe, y esta crece cuando se vive como consecuencia de un amor que se recibe y se comunica como experiencia de gracia y de gozo".

Recuerdan que "la familia es el ámbito natural donde es acogida la fe y la que va a contribuir de una manera muy especial a su crecimiento y desarrollo. En ella se dan los primeros pasos de la educación temprana de la fe y los hijos aprenden las primeras oraciones, como el avemaría, el 'Jesusito de mi vida', el 'Ángel de mi guarda' y el padrenuestro. También experimentan el amor a la Virgen, a Jesucristo, y es donde por primera vez oyen hablar de Dios y aprenden a quererlo viviendo el testimonio de sus padres".

Así, la familia, señalan, "es el 'lugar' privilegiado donde se realiza la unión de 'la fe que se piensa' con 'la vida que se vive' a partir del despertar religioso".

"Cuando la vivencia y experiencia cristiana se ha tenido en la familia puede que se atraviese por momentos de crisis, pero lo que se ha vivido de niño vuelve a renacer y a tener un peso específico en la fe adulta", afirman.

"No se puede pensar en una nueva evangelización sin sentirnos responsables del anuncio del Evangelio a las familias y sin ayudarles en la tarea educativa. La familia está inmersa en un proceso gradual de educación humana y cristiana que permite tener como centro la vocación al amor. A la familia le corresponde el deber grave y el derecho insustituible de educar y cuidar este momento inicial de la vocación al amor de los hijos. Esto se realiza en un ambiente sencillo y normal, el hogar, donde, de una manera connatural se va formando la personalidad humana y cristiana de los hijos. A esta educación contribuyen también las entidades educativas, el testimonio de los padres y hermanos, el contacto con otras familias, la pertenencia a la comunidad cristiana parroquial, y a grupos o movimientos cristianos".

Firma el mensaje monseñor Juan Reig Plà, obispo de Alcalá de Henares, presidente de la subcomisión episcopal para la Familia y Defensa de la Vida.

23 diciembre 2012

"HA MIRADO LA HUMILDAD DE SU SIERVA"

Artículo de Raniero Cantalamessa

El último domingo de Adviento es el que debe preparar inmediatamente a la Navidad. Las compras ya deberían estar hechas, y tal vez estamos un poco más disponibles para pensar también en el sentido religioso de la fiesta. El Evangelio es el de la Visitación de María a Isabel, que finaliza con el Magnificat: «Proclama mi alma la grandeza del Señor y se alegra mi espíritu en Dios, mi Salvador, porque ha mirado la humildad de su sierva»

Con el Magnificat María nos ayuda a captar un aspecto importante del misterio navideño sobre el que desearía insistir: la Navidad como fiesta de los humildes y como rescate de los pobres. 

María nos ayuda a volver a poner las cosas en su sitio y a no dejarnos engañar. Nos dice que frecuentemente los valores más profundos se esconden entre los humildes; que los acontecimientos que más inciden en la historia (como el nacimiento de Jesús) suceden en medio de ellos, no sobre los grandes escenarios del mundo. Belén era «la aldea más pequeña de Judá», dice la primera lectura del día; sin embargo, fue en ella en la que nació el Mesías. Grandes escritores, como Manzoni y Dostoiewski, han inmortalizado en sus obras los valores y las historias de la «gente pobre».

La «opción preferencial» de los pobres es algo que hizo Dios mucho antes del Concilio Vaticano II. La Escritura dice que «el Señor es excelso, pero se fija en el humilde» (Sal 138, 6); que «resiste a los soberbios, pero concede su favor a los humildes» (1 P 5, 5). A lo largo de toda la revelación se nos muestra como un Dios que se inclina sobre los pobres, los afligidos, los abandonados y aquellos que no son nada a los ojos del mundo. Todo esto contiene una lección actualísima. Nuestra tentación, en efecto, es la de hacer exactamente lo contrario de lo que hizo Dios: querer mirar a quien está arriba, no a quien está abajo; a quien le va bien, no a quien se encuentra en necesidad.

No podemos contentarnos con recordar que Dios orienta su mirada hacia los humildes. Debemos hacernos nosotros mismos pequeños, humildes, al menos de corazón. La Basílica de la Natividad en Belén sólo tiene una puerta de entrada, y es tan baja que no se puede pasar por ella más que inclinándose profundamente. Hay quien dice que fue construida así para impedir que los beduinos entraran a grupa de sus camellos. Pero la explicación que siempre se ha dado (y que contiene, en cualquier caso, una profunda verdad espiritual) es otra. Esa puerta debía recordar a los peregrinos que para penetrar en el significado profundo de la Navidad hay que abajarse y hacerse pequeños.

En los próximos días oiremos cantar muchas veces la antigua melodía Tu scendi dalle stelle, o re del cielo... [popular italiano compuesto por san Alfonso María de Ligorio: «Desciendes de las estrellas, oh rey del cielo». Ndt.]. Y si Dios descendió «de las estrellas», ¿no deberíamos nosotros bajar de nuestros pequeños pedestales de superioridad y de dominio, para vivir como hermanos reconciliados entre nosotros? También tenemos que bajar de nuestros «camellos» para entrar en la gruta de Belén...

14 diciembre 2012



JORNADA DE LA FAMILIA
SÁBADO, 29 EN LA CATEDRAL CON EL OBISPO
DOMINGO, 30 EN TODAS LAS PARROQUIAS Y TEMPLOS

                Queridos hermanos:

         Con motivo de la celebración del domingo de la Sagrada Familia (30 de diciembre), nuestro Obispo nos propone estas dos acciones:

         1ª.- El sábado 29, de 17,30 a 18,30 h., en la Catedral de Cádiz, Encuentro del Obispo con las Familias. Será un encuentro dinámico, con oración, testimonios, cantos navideños y bendición de las familias. A este encuentro están especialmente invitadas las familias y los movimientos familiares de Cádiz y del entorno de le Bahía.

         2ª.-  El domingo 30, en todas las parroquias y templos, celebración de la Misa dominical, con especial participación de las familias de la feligresía. Dentro de la celebración se puede invitar a los matrimonios a la renovación de los compromisos matrimoniales, y al final de la Eucaristía se puede impartir una especial bendición a las familias presentes. Ayuda: Para la preparación de esta Misa resultarán muy útiles el mensaje de los Obispos, y los subsidios litúrgicos y estampas que ya se han enviado por correo electrónico y que, en breve, recibiréis por correo postal.

         En el envío postal encontraréis también unos trípticos especialmente preparados para facilitar la oración de las familias en los encuentros hogareños de estos días festivos.

         Por otra parte, un año más, Madrid celebrará la fiesta de la Sagrada Familia en la Plaza de Colón. El día 30 de diciembre, a las 12,00 h., numerosos obispos españoles concelebrará una Misa, que se ha convertido ya en una tradición en la que participan incluso muchas familias de otros países de Europa. Con ello, se quiere dar un testimonio público del valor de la familia, tanto para la Iglesia como para toda la sociedad. Se ruega a aquellas comunidades o grupos que hayan organizado el desplazamiento a Madrid y tengan sitio disponible, lo pongan en conocimiento de esta Delegación, a través del blog de la Delegación:

http://familiayvidacadizyceuta.blogspot.com.es/

para poder ofertar los medios a quienes deseen ir y no tengan cómo.

 

         Agradecidos de antemano por vuestra colaboración, recibid un fraternal saludo de este hermano que queda a vuestro servicio.


Fdo.: Oscar González

13 diciembre 2012



PROYECTO DAVID

invita a participar este domingo tercero de Adviento
16 DE DICIEMBRE A LAS 11,30 H
en LA PARROQUIA DE NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO

en la EUCARISTÍA POR LA VIDA



Queridos hermanos:
 
Este domingo 16 de diciembre, 3º de Adviento, en que celebramos la que la Virgen está en la Esperanza del Parto, Proyecto David participará en la Eucaristía que se celebrará en la Parroquia de Nuestra Señora del Rosario a las 11:30. Allí, ante la imagen de la Virgen del Buen Parto, cuyo triduo se celebra en los días 16-17 y 18 de diciembre, rezaremos por todos los niños no nacidos y por sus familias, así como por las mujeres en riesgo de sufrir un aborto provocado, y seguiremos rezando por aquellas mujeres que atendemos y que sufren trauma pos-aborto.
 
Os esperamos en la parroquia del Rosario sobre las 11:15, para acogernos y colaborar en la liturgia, que ya estamos preparando, y gozar juntos de este domingo tan lleno de Vida.

Rocio Illana Martos

08 diciembre 2012

JUAN BAUTISTA PROFETA DEL ALTÍSIMO 
de Rainero Cantalamessa

II Domingo de Adviento, Ciclo C. 
Lucas 3, 1-6

El Evangelio de este domingo se ocupa por entero de la figura de Juan el Bautista. Desde el momento de su nacimiento, Juan el Bautista fue saludado por su padre Zacarías como profeta: «Y tú, niño, serás llamado profeta del Altísimo, pues irás delante del Señor para preparar sus caminos» (Lc 1, 76).

¿Qué hizo el Precursor para ser definido como un profeta, es más, «el mayor de los profetas» (Lc 7, 28)? Ante todo, tras la estela de los antiguos profetas de Israel, predicó contra la opresión y la injusticia social. En el Evangelio del domingo siguiente le oiremos decir: «El que tenga dos túnicas, que las reparta con el que no tiene; el que tenga para comer, que haga lo mismo». A los publicanos [recaudadores de impuestos. Ndt.], que tan frecuentemente desangraban a los pobres con requerimientos arbitrarios, les dice: «No exijáis más de lo que os está fijado». A los soldados, inclinados a la violencia: «No hagáis extorsión a nadie, no hagáis denuncias falsas» (Lc 3, 11-14). También las palabras sobre los montes que hay que rebajar, los barrancos por colmar y los pasos tortuosos por hacer rectos, podríamos hoy entenderlas así: «Toda injusta diferencia social entre riquísimos (los montes) y paupérrimos (los barrancos) debe ser eliminada o al menos reducida; los caminos tortuosos de la corrupción y del engaño deben ser enderezados». 

Hasta aquí reconocemos fácilmente la idea que actualmente tenemos del profeta: alguien que impulsa al cambio; que denuncia las deformaciones del sistema, que apunta su dedo contra el poder en todas sus formas –religioso, económico, militar- y se atreve a gritar en la cara del tirano: «¡No te es lícito!» (Mt 14, 4).

Pero Juan el Bautista hace también una segunda cosa: da al pueblo el «conocimiento de salvación por el perdón de sus pecados» (Lc 1, 77). ¿Dónde está, podríamos preguntarnos, la profecía en este caso? Los profetas anunciaban una salvación futura; pero Juan el Bautista no anuncia una salvación futura; indica a uno que está presente. Él es quien apunta su dedo hacia una persona y grita: «¡Aquí está!» (Jn 1, 29). «Aquello que se ha esperado durante siglos y siglos está aquí, ¡es Él!». ¡Que estremecimiento debió recorrer aquel día el cuerpo de los presentes que le oyeron hablar así!

Los profetas tradicionales ayudaban a sus contemporáneos a superar el muro del tiempo y mirar el futuro, pero él ayuda a superar el muro, aún más grueso, de las apariencias contrarias y permite descubrir al Mesías oculto tras el aspecto de un hombre como los demás. El Bautista inauguraba así la nueva profecía cristiana, que no consiste en anunciar una salvación futura («en los últimos tiempos»), sino en revelar la presencia escondida de Cristo en el mundo.

¿Qué tiene que decirnos todo esto a nosotros? Que también debemos mantener juntos esos dos aspectos del ministerio profético: compromiso por la justicia social por una parte, y anuncio del Evangelio por otra. No podemos partir por la mitad esta tarea, ni un sentido ni en otro. Un anuncio de Cristo, sin el acompañamiento del esfuerzo por la promoción humana, resultaría desencarnado y poco creíble; un compromiso por la justicia, privado del anuncio de fe y del contacto regenerador con la palabra de Dios, se agotaría pronto, o acabaría en estéril contestación. 

Nos dice también que anuncio del Evangelio y lucha por la justicia no deben quedarse como cosas yuxtapuestas, sin vínculo entre sí. Debe ser precisamente el Evangelio de Cristo el que nos impulse a luchar por el respeto del hombre, de forma que se haga posible a todo hombre «ver la salvación de Dios». Juan el Bautista no predicaba contra los abusos como agitador social, sino como heraldo del Evangelio, «para preparar al Señor un pueblo bien dispuesto» (Lc 1, 17).
(artículo publicado en el periódico digital religionenlibertad.com)

02 diciembre 2012


CELEBRACIÓN DEL RETIRO DE ADVIENTO EN LA DIÓCESIS DE CADIZ Y CEUTA


El pasado domingo, día 2, celebró el Movimiento Familiar Cristiano de la Diócesis de Cádiz y Ceuta, el Retiro de Adviento, en la parroquia de la Divina  Pastora de San Fernando.
Fue una jornada  propicia para  que, dentro del espíritu del Adviento, se prepararan a la venida del Señor los matrimonios integrados en el MFC.
Se inició el día con el rezo de Laudes y a continuación el Consiliario P. Balbino Reguera habló de la importancia del Adviento vivido desde la fe,  con un espíritu de conversión, preparándonos  al encuentro con el Señor, que vendrá a juzgarnos  por nuestras obras y nuestra respuesta con los necesitados; pues no podemos pasar sin revelarnos,  ante las situaciones de injusticia y discriminación que vemos  a nuestro alrededor, aunque poniendo nuestra confianza en Dios que es sensible al sufrimiento humano.
Tras un tiempo de reflexión y contemplación ante el Santísimo, nos impartió la bendición.
A continuación se celebró la Eucaristía, con la participación de matrimonios de las localidades de  Barbate, Cádiz, San Fernando  y Vejer, que fue presidida por el P. Balbino. En ella se interpretaron cánticos de esperanza, propios del tiempo de Adviento.
Terminó este día de oración y convivencia con un almuerzo compartido en el que  pudimos confraternizar y desearnos lo mejor para las próximas Navidades en que celebraremos  en familia la venida del Señor.

El Equipo de Presidencia Diocesano